Vistas de página en total

El descubrimiento del Fuego

domingo, 30 de enero de 2011


EL FUEGO
Se supone que el hombre prehistórico conoció el fuego por la erupción de un volcán, un incendio de pajonales o la caída de un rayo. El fuego fue conocido por el hombre casi 500.000 años antes de Cristo. En sus comienzos, el mayor problema era cuidar ese fuego que llevaban a las aldeas y mantenerlo encendido.

Todavía no sabían encenderlo ni alimentarlo con combustibles.Cuando entraban en posesión del fuego era probable que nuevamente lo perdieran y había que esperar que otra vez la naturaleza les brindara la oportunidad de volver a conseguirlo.

A raíz de esta necesidad, se nombraron guardianes del fuego. En Roma existió la orden sacerdotal de las vestales que cuidaban del fuego sagrado. Si una vestal dejaba apagar el fuego sagrado era sepultada viva en castigo.

Cuando el hombre prehistórico logró encender el fuego, dominó uno de los elementos que más iba a servir en el avance de la civilización.Una de las huellas que aseguran el uso del fuego en la prehistoria, data de 340.000 años antes de Cristo, fue encontrada en China, ero no se sabe con certeza si lo conservaron de la naturaleza o si lo encendieron por sí mismos.

PRIMEROS ÉXITOS: El primer método de encendido suponen que fue el del frotamiento de una punta de palo seco sobre un mismo punto de una madera seca.Otro similar consistía en frotar una liana en una ranura efectuada en la madera.El más común fue el de rotación de una punta de palo sobre una madera.También se logró encender mediante chispas producidas con piedras que contengan piritas de hierro.Además del encendido, se debió resolver el problema de dónde encender y conservar el fuego: sobre piedras, en cavernas, enterrado en un pozo, enterrado en un hueco revestido con piedras.Habría que esperar hasta 1827 (otros dan el año 1832) para lograr disponer de un invento como los fósforos, para lograr un encendido fácil.

USOS VARIOSY el hombre, al tener el fuego, comenzó a descubrir sus posibilidades:Al mantener las fogatas, obtenían calor en los crudos inviernos.El fuego y el humo de sus fogatas le sirvieron para efectuar las primeras comunicaciones.Con teas encendidas lograban mantener alejados a los animales peligrosos.Se servían de las llamas como armas en las luchas y cacerías.Los hombres, que hasta entonces, se alimentaban de alimentos crudos, comenzaron a notar que era más cálido y reconfortante la comida cocida y caliente, en especial en los climas de frío riguroso.Cocinaban la carne de los animales que cazaban, poniéndola en una varilla paralela al fuego, apoyada sobre dos parantes verticales.También envolvían la carne en abundante barro y la colocaban en un hueco con brasas en la base y también cubierta en la parte superior por abundantes brasas.Y una tercera forma, ya utilizando recipientes, sobre el fuego, para realizar la cocción.Al prestar atención a la tierra endurecida en derredor de las fogatas, comenzó a trabajar en barro, moldear y luego mediante la cocción sobre el fuego, lograr piezas de alfarería, vasos, vasijas y recipientes, que a la vez les servían para cubrir sus necesidades (Hay muchos vestigios de vasijas realizadas en arcilla por el hombre del período mesolítico, alrededor del 8.000 antes de Cristo).

Con el transcurrir del tiempo fue logrando avances y comodidades; y utilizó el fuego para alumbrarse en las horas de oscuridad, con lámparas y velas.Y también lo usó para hacer funcionar las fraguas, los hornos, derretir metales y lograr la fabricación de diversos elementos, desde el pan de cada día, hasta las herraduras de los caballos o las fabricaciones de lozas y porcelanas, pasando por variedad de productos. lo usa para la cocción de la alimentación, la calefacción, y un sin fin de cosas cotidianas que hacen más placentera la vida.






La conquista de América

domingo, 9 de enero de 2011



Siempre que se cuenta o se escucha una historia es necesario que por un momento nos coloquemos de las dos partes porque de lo contrario corremos el riesgo de asimilarla como versión absoluta y eso nos limita al momento de analizar o realizar una crítica.

La historia sobre el descubrimiento de América no debería ser la excepción y por el contrario deberíamos analizarla desde la perspectiva americana y desde la europea y solo así sacar nuestras conclusiones acerca de un evento tan importante en la historia universal

Algunos dicen que fue el descubrimiento de este continente, otros afirman que fue una conquista donde simplemente masacraron a los indígenas quienes habitaban estas tierras desde hacía mucho tiempo atrás. Hoy, luego de cinco siglos, el debate continúa.

En el debate terminológico sobre la manera de denominar el acontecimiento sucedido el 12 de octubre de 1492 se han desarrollado diversas posiciones, cada una de ellas vista desde los intereses de cada grupo social es así que encontramos dos versiones claramente definidas.

La versión tradicional hispánica que se usa desde fines del siglo XVI, primero en la cultura occidental y luego en todo el mundo, en la que se ha utilizado el término “Descubrimiento de América”, para referirse al acto realizado por Colón el 12 de octubre de 1492, al llegar a la Isla Guanahani y con algunas modificaciones esta versión abarca los subsiguientes viajes de Colón y los posteriores viajes a cargo de la corona española.

La versión indígena-americana ha cuestionado el término “Descubrimiento de América” por considerarla una denominación eurocéntrica, que ignora la presencia de sus antepasados en América al momento de la llegada de los españoles, dando prioridad a la idea de América como “tierras” antes que como pueblos, con el fin de legitimar culturalmente la posterior dominación y colonización de la que fueron objeto.

La posición hispanista estuvo originalmente vinculada a la invención en 1915 del controvertido “Día de la Raza” como Día de la Hispanidad y de la Raza Española, para el 12 de octubre, aunque luego varios países ablandaron su significado para relacionarlo con una supuesta raza mestiza. En general han propuesto términos alternativos como “Invasión de América”, o “Día de la Resistencia”, entre otros.
El mundo entero se ha volcado ha tratar de contar una versión conciliatoria, proponiendo “conciliar” las posturas hispanista con la indigenista sosteniendo que antes que poner el acento en la mayor o menor violencia que pudiera haber caracterizado la llegada de los españoles a América, lo que se debe destacar es el hecho del encuentro entre dos grupos de culturas humanas que habían vivido separados por milenios. Esta versión propone denominar “Encuentro de Dos Mundos” o “Encuentro de Dos Culturas”, al hecho de la llegada de Colón a América.

Hugh Thomas, un escritor británico en su libro El Imperio español antes de entrar en el primer viaje de Cristóbal Colón a América, el autor hace una minuciosa descripción de las circunstancias políticas y militares de España (matrimonio de Isabel y Fernando, conquista definitiva de Granada); presenta a los principales personajes y hace hincapié en el poder de la corona, el sometimiento de la nobleza y su importancia, y los mercaderes.

Lo que decidió a la reina Isabel a apoyar a Colón fue que éste ya estaba dispuesto a ofrecerse a Francia o Inglaterra. Además, según Thomas, económicamente aquella expedición no fue tan gravosa. La reina gastó menos en ella que en la boda de sus hijas.

Aquel puñado de hombres que en unas décadas sometieron un territorio decenas de veces mayor que España y mucho más poblado no eran, según Thomas, unos locos. En ellos había una mezcla de "aventurismo, curiosidad, deseos de ganar almas para la religión católica y codicia". El autor es contundente cuando asegura que "aquello no fue un encuentro entre dos culturas", como pretende la versión oficial del quinto centenario, "sino una conquista militar con todas sus consecuencias".

En esa fulminante dominación, la tecnología y el uso de caballos fueron importantes. El resto lo hizo la colaboración de los pueblos sometidos por los aztecas, en el caso de México, y los incas, en el de Perú. Creyeron que los españoles eran aves de paso hacia China y Japón.

En conclusión es responsabilidad de cada uno de nosotros determinar cual es nuestra posición crítica frente a este acontecimiento mundial y del cual nosotros somos herederos  pero lo que no debemos olvidar es que hoy, después de más de 500 años de interactuar somos un verdadero nuevo mundo, una nueva realidad.

Nuestro continente es culturalmente mestizo y en eso radica su enorme variedad y riqueza.



FUENTES:

http://noticiaaldia.com/2010/10/12-de-octubre-dia-de-la-resistencia-indigena/